Perfume de paraísos
En el aire hay perfume de paraísos,
el cielo gris, y un corazón
que late de versos callados.
Alrededor de la plaza, unas señoras idénticas, tiran las cartas,
arcanos mayores desparramados sobre unas mesitas, bajo la llovizna.
Me pregunto el significado de estas presencias
rodeándome,
ancianas circulares con acentos extranjeros,
una de ellas me dijo, al verme pasar:
"- ¿Querés saber tu destino?"
Y yo, con mi corazón encerrado en un cuaderno invisible,
empecé a escribir versos que iban a enredarse en los balcones verdes.
Callados versos de un octubre incierto.
En el aire hay perfume de paraísos,
las ancianas enmudecen sus predicciones,
las cartas del Tarot inventan historias
donde los poetas pueden explayarse
sobre pestañas oscuras y sonrisas de luna.
Camino.
Las ancianas y mi destino,
comienzan a desaparecer.